viernes, 25 de mayo de 2007

Leyendo a Whitman

Muchas cosas que hacer, sobretodo de cara a los dos ultimos meses de mi estancia en España, pronto a volver no he encontrado algo mejor que leer a Whitman


DE "CANTO A MÍ MISMO"

Me celebro y me canto a mí mismo.
Y lo que yo diga ahora de mí, lo digo de ti,
porque lo que yo tengo lo tienes tú
y cada átomo de mi cuerpo es tuyo también.

Vago... e invito a vagar a mi alma.
Vago y me tumbo a mi antojo sobre la tierra
para ver cómo crece la hierba del estío.
Mi lengua y cada molécula de mi sangre nacieron aquí,
de esta tierra y de estos vientos.
Me engendraron padres que nacieron aquí,
de padres que engendraron otros padres que nacieron aquí,
de padres hijos de esta tierra y de estos vientos también.

Tengo treinta y siete años. Mi salud es perfecta.
Y con mi aliento purocomienzo a cantar hoy
y no terminaré mi canto hasta que muera.
Que se callen ahora las escuelas y los credos.
Atrás. A su sitio.Sé cuál es su misión y no la olvidaré;
que nadie la olvide.
Pero ahora yo ofrezco mi pecho lo mismo al bien que al mal,
dejo hablar a todos sin restricción,
y abro de para en par las puertas
a la energía original de la naturaleza desenfrenada.
Versión de León Felipe

sábado, 5 de mayo de 2007

De noche en Salamanca...

Entre otras cosas disfruto de la noche en Salamanca, no sólo por la alegría de sus bares y de su ambiente universitario. No quizá lo que mas disfruto es cuando vuelvo a casa y camino por esas calles desiertas en las que me encuentro con la libertad. La libertad de calles llenas de historia, la libertad de ser lo que otros no soñaron.

Que más dan los viejos edificos eclesiásticos convertidos en tiendas de marca o en bares posmodernos. Lo que importa somos tú y yo, soñando en la oscuridad futuros indecibles en los que todo lo que fue no será.

Dejándome llevar por el viento, por las flores, quizá por el ambiente de primavera que quiere ser y al que un coletazo de invierno no quiere dejar que venga.

Mientras sigo caminando, por las calles de Salamanca, no sé que voy a encontrar, quizá el amor, la soledad o quizá simplemente a mí mismo.

jueves, 3 de mayo de 2007

MAYO DESCONCERTANTE....


Es mediodia de un mes que debería ser primaveral, un poco más de calor nos vendría bien. Pero tenemos días en los que no se sabe bien si habrá sol, lluvia, frio o quizá soledad.


Asi de desconcertante vivo este mes, en unos días tendré que haber terminado mi Memoria para entregar a la Facultad de Teología. En realidad estoy revisándola una y otra vez. Siempre encuentro nuevos errores o nuevas ideas que incluir. Sigo esperando el día que el obispo nos reciba para confirmar fecha y hora de la ordenación diaconal. Y quizá lo más desconcertante sigo esperando que mi superior me indique si acaso ya tiene más claro hacía dónde quiere proponerme como destino final a partir de julio. Como ven mayo es desconcertante.


Mientras tanto preparamos el concierto de primavera, la jornada de puertas abiertas, la excursión y la fiesta de Santo Domingo.


En fin. Todo se acumula, todo me incierta, y creo que no siempre puedo decir como Teresa de Avila: "Sólo Dios basta".