lunes, 2 de febrero de 2009

Para decidir si sigo poniendo esta sangre en tierra...


Así empieza la canción "Razón de vivir" de Victor Heredia. Y así retomo yo esta bitacora. ha sido poco más de un mes sin acercarme, sin escribir. Y es que enero, para mí, siempre resulta violento. Siempre se me ha vuelto un tiempo de rupturas, quizá por esa nostalgia o angustia existencial que me acompaña, quizá por la necesidad de querer ver el horizonte con demasiada claridad. Sin embargo, a este enero se le suman 3 semanas de reuniones (Asamblea, Capítulo y Definitorio Provincial en San Salvador) y el resto del mes correrías para empezar bien el año.


Así es que hasta hoy puedo retomar este microciberespacio. Mientras escribo, no puedo dejar de pensar en lo Vulnerable de nuestras vidas (como dice el novelista chileno Pablo Simonetti), lo vulnerable que me he sientido este ulitmo año: muerte de Miguelito Méndez, Miguelito Iribertegui, Antonio Gomez y Jorge; todos dominicos, algunos más jóvenes que otros. Y a pesar de sus muertes, estamos aquí, tratando de enfrentar esta sociedad en la que cada día encontramos más argumentos, y todos razonables, para no creer.


Cada día, contra lo que muchos pueden afirmar, Dios se esconde más, y cuando más se le comprende menos es Dios (San Agustín decía: Cuando lo comprendes, entonces no es Dios). No cabe duda que, en este año de San Pablo, se nos hace una necesidad el tratar de comprender más y mejor "la kenosis", el anonadamiento, el abajamiento, la negación de Dios de su propia divinidiad. Quizá, en la medida en la que profundizamos en esta experiencia que San Pablo expone en sus escritos, podamos descubrir lo divino en las afueras de Dios.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias Mario por lo que escribes, por lo que dices, por lo que sientes y por compartirlo con nosotros. Ha sido un tiempo intenso, lleno de luz, lleno de sombra, pero sobre todo lleno de esperanza. Seguramente la mente humana no puede entender con palabras lo que los sentimientos quieren expresar, es tambien un rito de la vida que vamos aprendiendo poco a poco. Que estos hermanos nuestros, que aprendieron a vivir la vida sigan siendo luz que alumbra nuestro camino. Siempre los que han amado son cálidos y sencillos como dice la canción de Alux Nahual. Hay mucha esperanza mientra luchemos por la vida. Alexis